jueves, 31 de enero de 2008

honey


y sí, la perla cayó redonda en las aristas de la joya, redonda y pensando, no sé qué me pasa, pero algo ando trayendo en la carne, en el cutis antes ajado de tanto chillar. y eran palabras las que se caían solas entre las crines de las yeguas que ya no parían, que pastaban y meaban miel. entre la miel y el brillo de la joya, la perla se miró colapsada por lo sereno que tenía el rostro, por la desaparición de la torpe necedad. y así siguió posando y observándose entre la miel y la joya, posando; porque no sabía hacer otra cosa, porque era lo que más le gustaba hacer.

2 comentarios:

[][][]SIREN[][][] dijo...

weona
amo a esta perla la amoooooooooooooooooooooo
es la zorra!!!
jona

Anónimo dijo...

Ha de ser una posada con establo. Arre, arre!

Cabe decir que fue un verdadero honor tenerte para mi lanzamiento. Honor en cuanto calidad humana. Un honor con sabor a gustazo. Un gustazo de categoría lujosa. Un desmedido y sincero placer.

Así mismo fue encontrar este blog, hace ya un tiempo, y ahora, bueno, tuve que postear.

Besos, Paula, y dale mis saludos a Felipe, de quien soy un desaparecido.

Pero esa no es la verdá.